Oración contra mal de ojo, envidia, traición y falsedad

Oración para rezar individualmente, para tu protección contra: mal de ojo, envidia, traición y falsedad.

1º Hacer tu oración íntima, la que haces con el Padre.

2º Pedir al Creador que guarde y proteja nuestro espíritu, nuestra alma, nuestra mente, nuestras espaldas, nuestra derecha, nuestra izquierda, desde lo alto de nuestra cabeza hasta las plantas de nuestros pies.

Oración

Si hay ojo que me mire con codicia, que se ciegue con la luz que llevo.
Si hay lengua que me lama con falsedad, que pruebe su propio veneno.
Si hay serpiente en mi camino, que se arrastre lejos.
Si hay veneno lanzado en pensamiento, que vuelva a su origen sin prisa, pero con justicia.
No soy refugio para el mal disfrazado.
No soy nido para la envidia escondida en un abrazo.
Mi energía tiene raíz.
Mi luz tiene espinas y quien intente morder, sangrará.
Hoy corto lo que no es mío.
Rompo el lazo que vino sin amor.
Deshago el nudo hecho en silencio y sigo mi camino.
Lo que me pertenece está protegido.
Lo que me atraviesa, ya no me toca.
Y si es serpiente, que pierda el rastro.
Que así se limpie, que así se cierre.
Agradezco en nombre de mi Creador, Yahuah, a mi Redentor, Yahushua Hamashia, y a quien me dirige y guía, Ruach Hakodesh.
El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. 🙏

Alimento para el alma es la palabra de Dios

‘El Señor es quien te guarda; el Señor es tu sombra a tu mano derecha.’
(Salmos 121:5)

Dios es nuestra sombra protectora, un lugar de descanso que nos refresca con su amor en medio del calor de las pruebas. Él es nuestro refugio constante. Hoy, que podamos buscar el reposo en la sombra del Señor, confiando en que Él nos cubre y nos renueva, para que podamos enfrentar la vida con paz y fuerza renovada.

Oración: Dios, te alabo por hacerme reposar en tu sombra. Refréscame con tu amor y guíame en tu descanso. Que yo viva en tu paz, en el nombre de tu Hijo Jesús, amén.

Oración para Empezar el Día

¡Padre!
Te agradezco por la noche de sueño, desperté restaurada y lista para un día más en tu compañía.

Estoy agradecida porque Tú, Señor, velaste por mi descanso, me permitiste abrir los ojos y reverenciar el hermoso día que me espera.

He estado muy atareada, el cansancio ha sido frecuente, pero no me alejo de Ti y sé que ningún esfuerzo será en vano.

Mi victoria está cerca, puedo sentirlo.

Me pongo en oración, consagro mis anhelos a mi Padre y sé que, trabajando arduamente, cosecharé frutos de paz y bien.

¡Oración de la Noche!

Padre, gracias por sostenerme un día más y por ayudarme a vencer mis luchas de hoy.
Padre, Tus palabras están bien guardadas en mi corazón, y son ellas las que me consuelan, traen paz y me dan fuerzas para continuar. ¡Amén!

Versículo de la noche:
“Concede a tu siervo esta gracia: que yo viva guardando tus palabras”.
(Salmos 119:17)